viernes, 14 de noviembre de 2008

La próxima Comisión Europea

Al parecer, los rumores en Bruselas confirman que Barroso seguirá siendo Presidente de la Comisión europea después de las elecciones de mayo de 2009. Un presidente cuya agenda ha sido prácticamente no hacer nada y mantener un perfil bajo. Barroso es impulsor de la Agenda de Lisboa, que sí que es muy importante, porque es la única respuesta seria a los desafíos de Europa como potencia económica en el mundo, pero claro, con el presupuesto que ha tenido, se queda en simple declaración de intenciones.

La Comisión Barroso. Ni Frattini, ni Mandelson ni Kiprianou están ya. Sin embargo, ésta es la foto oficial. ¿Tanto cuesta juntarlos a todos para otra foto, que trabajan en el mismo edificio y se juntan todos los miércoles?
(c) Comunidad Europea 2008

Radio café me informa de que va a seguir, según ha comentado algún Jefe de Gabinete y según parece que ha sido el acuerdo general del Partido Popular Europeo, que es quien lo sostiene, con el asentimiento de los socialistas.

Ahora bien, la segunda pregunta es qué va a pasar con la Comisión nueva. Antes, cada país grande tenía dos comisarios y cada país pequeño tenía uno. Todos contentos. Con la ampliación, estaba claro que era mucha gente y que entonces había que reducir a un comisario por cada país, grande o pequeño. Pero aún así, era (y es) demasiado, porque se preveían 27 comisarios. Todos ellos, como si fueran ministros, necesitan una cartera, es decir, algo que hacer. Muchos comensales para poca tarta.

Total que en esas estamos cuando llega el Tratado de Niza, en 2000, que es el que está en vigor, y que decide que la Comisión tendrá un miembro por Estado, pero que a partir de 2009, no habrá más que 15 comisarios. 12 países se quedarán sin comisario por cinco años, y habrá que decidir cómo.

¿Quién le pone el cascabel al gato? ¿Quién decide qué país se queda sin comisario? Los socios europeos se acojonaron e intentaron en dos ocasiones enmendar lo dicho: Una, con la constitución europea, y otra, con el tratado de Lisboa, ambas rechazadas en referendos. Nos quedamos con Niza, serán quince comisarios a partir de mayo y no vale otra cosa.

Pues eso. Que en esas estamos. Barroso dejó caer, con todo el morro del mundo, que quizá habría que prorrogar la Comisión actual. ¿Pero esto qué es? La cosa es que ahora que sabe que seguirá, quizá le dé igual y admita soltar la mano y que caiga quien tenga que caer.

A mí se me ocurre que lo mejor es que los países grandes que tenían dos comisarios, que son Alemania, Francia, Reino Unido, Italia y España, más Polonia, tengan siempre un comisario. Y los otros nueve, que roten. Pero como todo el mundo se huele que tal rotación sólo se dará una vez porque a la próxima reforma habrá 27 comisarios, pues claro, nadie achanta.

Ya veremos, ya veremos.

12 comentarios:

Anónimo dijo...

Bueno, el reparto de una tarta siempre es complicado, pero en mi opinión, con un poquito de espíritu democrático podría ser menos difícil.
Considero que el funcionamiento de todas las instituciones debería estructurarse por competencias y cada departamento (o ministerio si lo prefieres) podría estar formado por un representante de cada país miembro, constituyendo todos ellos un órgano colegiado de cada materia que tomaría sus decisiones por mayoría cualificada o, en su defecto, mayoría simple siempre sujetos a un plazo razonable para no ralentizar en exceso las decisiones. Esta estructura permitiría aguantar cuantas ampliaciones futuras tengamos que ver sin levanta suspicacias, pues cada Estado miembro significaría siempre un voto en la decisión del órgano colegiado.
Supongo que alguien pensará que esta idea no es nueva y tiene razón, esto ya lo decían los griegos, pero sigue siendo igual de valido. Ahora bien, ¿sería posible esto en este nuestro Supraestado?

Alfonso dijo...

Hum... No sé yo. En realidad ya es así: El Parlamento europeo tiene diputados de todos los Estados miembros. En el Consejo de la UE participan ministros de cada Estado miembro. En la Comisión hay un comisario por Estado miembro hasta ahora, y cada decisión que toma la Comisión está supervisada por un comité ad hoc formado por funcionarios de cada Estado miembro, que decide por mayoría cualificada (lo que se llama "comitología", en agricultura por ejemplo hay 45 comités). La representación nacional está siempre garantizada en la UE.

La cuestión es que la Comisión Europea es un órgano colegiado que toma sus decisiones por mayoría, por lo que cada comisario se lee los dossiers de todos los demás, porque ha de votarlos. Al final, la realidad es que las reuniones de gabinetes de los comisarios previas a cada reunión semanal se convierten en negociaciones donde el jefe de gabinete defiende los intereses nacionales de su jefe, aunque la nacionalidad del comisario no sea la misma que la de su jefe de gabinete.

Es así, y ahí está la madre del cordero. En que todos los Estados quieren tener mano en la "cocina" de las decisiones de la Comisión, a través de su propio comisario. Eso de que los Comisarios actúan por el interés general de la Unión es verdad, pero también con la otra mano actúan por el interés del Gobierno de su Estado miembro.

Charlotte Harris dijo...

Heyyy!
Muy interesante tu blog!
Te agrego a "Españoles en Bruselas" y a mi lista de Google Reader, que tus proximas entradas no me las pierdo!
Saludos

Anónimo dijo...

Es decir, que en el fondo no confiamos los unos en los otros y cada quien prtende barrer para su casa, sin entender y, sobre todo, sentir, que la casa es de todos ¿verdad? Pues entonces se entiende la "preocupación o alarma" en estas cuestiones. Aunque a los españoles no debería sorprendernos, no somos capces de entendernos en cuestiones tan fundamentales como la distribución solidaria de de los recursos naturales necesarios para la vida como es, por supuesto, el agua.
En fin, con un poquito de suerte incluso nuestros dirigentes crecen y maduras, si lo hicieron los votantes de Obama....

Alfonso dijo...

Srta. Harris, ¡cuánto honor! Muchas gracias por su visita y ya sabe que ésta es su casa. Llevamos poquito tiempo emitiendo.

Al visitante anónimo:

No se trata de que barremos todos para nuestra casa o no. Los Diputados al Parlamento europeo, por ejemplo, que son bastante nacionales, piensan más de lo que parece en el interés general cuando escriben y votan sus informes. Lo mismo que los comisarios, o incluso una posición nacional no prosperará en el Consejo de Ministros (donde cada Estado defiende lo suyo) si no se justifica el interés nacional en consonancia con un interés europeo superior. Por no hablar de las otras dos instituciones, el Tribunal de Justicia y el Tribunal de Cuentas, donde hay un juez y un consejero por país y son 100% independientes.

Sí es cierto que cuando estamos hablando de políticas públicas de día a día ("low politics"), al final la racionalidad de cualquier representante político es de defender el interés de su jefe. Y en esas estamos. Que el sillón de comisario europeo es muy goloso porque la Comisión tiene el monopolio de la iniciativa comunitaria, y todos los comisarios tienen voz y voto para todos los dossiers. De hecho, España confía en Joe Borg, el maltés, para asuntos de pesca (cuando la flota pesquera más grande es la española) pero no está de más que Almunia le haga de vez en cuando alguna sugerencia. ¿Usted cree que un Estado se la jugaría a renunciar a tener un sillón de comisario? Pues eso.

Estoy de acuerdo en que hay que tener altura de miras y sacrificar algo de legitimidad (una decisión es legítima si la consiente el afectado por la misma) por eficiencia (es más difícil dar resultados y hacer cosas cuanta más gente tenga que meter la cuchara en las decisiones). Pero claro, nadie quiere ser el primero en quedarse sin comisario, y más si tienes claro que, como se sabe que los tratados van a cambiar, los demás no van a pasar por el mismo aro.

En cuanto a España, tenemos un sistema muy poco cooperativo entre territorios (el Senado por ejemplo no funciona) y esto hace que tengamos encontronazos para todo, y que las autonomías sean competitivas. Así nos va como nos va. Le recomiendo pasarse por mi post sobre el pabellón murciano en la Expo del agua en Zaragoza.

Anónimo dijo...

Hola Alfonso y otros,
Empiezo diciendo que no conozco mucho sobre nuestro "gobierno" europeo, lo que me parece a mí una situación bastante general de por los ciudadanos de nuestro continente.
A mi me parece que el Sr. Borroso es buen servidor de Don Nicolas, quién a él le gusta mucho, por extensión, extender su título de "Presidente" de la republica francesa a la de todos européos confundidos. Es verdad, que las condiciónes economicas le dan gran impulso a esta idéa simplificadora: es que necesitamos, todos, un apoyo firme tras las nieblas de esos malos tiempos.
A mi, belga, me parece un maltrato de no tener derecho, de manera permanente, al dedo en el guiso. Se trata de la mera traducción de un elemento de democracía que tenemos tradición, despues de unos -históricamente bastante pocos- años, de disfrutar. A mi, y por cierto que no estoy solo, me parece que carece la entidad "Europa" de una organisación, una estructúra, favoriciendo la representación equitable. Verdad, me gustería mucho más un "The United States of Europe". En la organisación de EEUU, no tiene mucho importancia de donde provienen los secretarios de estado: se trata de USA, en primer lugar. Y aqui, deberé tratarse de EUROPA. Sé que se ha crecido, en Europa, otra concepción basada, ella, por el filtro de las "naciones". Como si, para participar en Europa, hay que pasar por un filtro addicional, a mí juicio, innecesario. Todo eso, me canse y no induce a gran participación directa, algo que siento, pues...se trata de una necesidad primera para el futúro. Lo que hay que hacer es inducir la gente a sentirse participante del...poder, y no de excluir unos (pequeños) del sentimiento de esa participación.
El hereje del Norte (Pablo)

Alfonso dijo...

Claro Pablo, ese es el problema de Europa. No existe un "demos" europeo, un pueblo europeo, con opinión pública europea y poder europeo. Pero en España ya es así también, de hecho en España los gobiernos deben tener ministros de más o menos todas las regiones... y las listas de eurodiputados también siguen una norma no escrita de estar regionalizadas. Cosa que a mí me parece bien si se sigue como orientación general, pero me parece mal si se lleva hasta el extremo.

El problema son las dos variables de legitimidad y de eficacia. Cuanta más gente tenga que hablar, decir, poner y quitar, menos operativo es el gobierno pero más legítimas son las decisiones. Por otro lado, si todo se hace por consenso, de forma colegiada, etc etc, al final vamos al mínimo común denominador, todo sale de color gris y al final manda el gran capital y pocos más. Además, nunca sabes si la Comisión es de izquierdas o de derechas porque hay de todo. Una cosa como Bélgica, donde aunque cambie el gobierno todo sigue igual porque siempre hay los mismos partidos y la misma gente en las comisiones y órganos colegiados.

¿Qué tal un Presidente europeo con poderes reales, elegido por sufragio universal, de manera que la gente pueda saber qué cosas se han hecho bien y qué cosas se han hecho mal al final de su mandato?

Alfonso dijo...

Parece que Joschka Fischer nos da la razón en El País de hoy:
http://www.elpais.com/articulo/internacional/Durao/Barroso/debil/sera/premiado/mandato/elppgl/20081118elpepiint_12/Tes

Anónimo dijo...

¿Presidente Europeo?
Sín el apoyo de varios niveles de representación estructurada hasta Europa como el concepto primordial de que constitue el nivel "nacional", una hipotética nominación, aúnque séa por sufragio universal, de un presidente "fuerte" me parece totalmente imposible, nonsensico, de por la imposibilidad material de alcanzar ni el mínimo consensus.
Sencillamente falta, hoy al día, la estructúra adecuada.
El prestigio y poder de la nación (la del siglo XIX) queda, aún, demasiado fuerte. Pero va, despacio, hace una quiebra. Que lástima que siempre necesitamos un crisis devastadora para que se cambiaran las cosas. Ya ves, con la crisis económica actual, como se comporten Sarko, Barroso, Merkel, Juncker y otros. Es dramático. Y necesario.
(Pablo...)

Alfonso dijo...

No sé si es sénsico o nonsénsico (con sentido o sin sentido) pero sí que los nonnatos Tratados constitucional y de Lisboa preveían un Presidente del Consejo con carácter independiente y poderes.

¡La cuestión es que la UE se está disolviendo como un azucarillo, Pablete!

PabloElFlamenco dijo...

No puedo aguantar que, si fuera verdad lo del azucarillo, ya Ud. y yo quedaríamos, otra vez, ...extranjeros... NO puedo aceptar eso, me parece un paso atras imposible. Tuvo mucho "comfort" (bienestar, alivio...!) en la idea de Europa.
(verdad, en materia de gramática, si que somos extranjeros) :-)
De Polle

Esther Herranz García dijo...

Pues yo creo que el reparto que propones de 2 por cada país grande y 1 para España y otro a Polonia y que rotn los demás no me parece mal, pero lo que me preocupa, de verdad, no es tanto cuántos son los Comisarios... si no a ué se dedican. me preocupa y sufro habitualmente que un británico negocie en la WTO en nombre de la UE y que una persona como Fisher Boel sea quien aplauda al que negocia en la WTO. Y nadie les cuestionó al ser candidatos... en cambio otros sectores, más potentes con sus lobbies, consiguieron "cargarse" a otros pretendientes a Comisario...